José B.
Ruiz

Equilibrio asimétrico. Estructuras

El equilibrio es una de las más fuertes fuerzas de expresión, responsable de un considerable impacto visual. A menudo se confunde el concepto de equilibrio con el de armonía, dada su importancia en la imagen. El equilibrio puede estar o no presente en la formulación de contraste, pero es imprescindible en una propuesta de armonía, sin ser equivalente, ya que la armonía tiene una formulación compleja con muchas variables, de las que el equilibrio es solo una más.
En busca de ese reparto de pesos, de elementos en el encuadre, surgen varias propuestas de estructuras. Entre ellas está la de los puntos de interés, cuatro áreas donde se dice que es eficaz situar elementos en la imagen.
Sin embargo, en ningún tratado de los maestros de la pintura que haya leído aparece el esquema de los puntos de interés, tan popular entre los fotógrafos. Tras haber practicado este esquema lo deseché, no me servía en la estética de mis imágenes. Esta estructura deja mucho espacio hacia los márgenes de la imagen, con la consiguiente tendencia a permitir el reencuadre de la misma.
En mi opinión deposita una gran carga visual hacia el centro de la imagen, dejando los márgenes vacíos, no permitiendo un buen equilibrio asimétrico y acortando el posible diálogo visual entre sujeto y fondo.

Nunca he utilizado esta estructura ni he visto que los maestros de la pintura lo hicieran, suelen aplicar la proporción sesquialter o hemiolia (tercios) una única vez en busca de ejes, de estructura, no de puntos de interés.

Mi propuesta es utilizar otros esquemas, cuyas variantes y nombre hice en 2014 sobre la base de conocimientos más antiguos. Se trata de esquemas de diálogo en diagonal entre un punto del primer plano y un elemento en el fondo. Me resultan muy prácticas por la propia naturaleza del punto (cualquier figura de pequeño tamaño en el encuadre) pues no sólo abundan en el entorno, sino que son fácilmente transportables a un punto del encuadre.
Estos esquemas no tenían nombre hasta hace bien poco y sus variaciones tampoco existían previamente, fueron realizadas durante un curso en el centro de tecnologías avanzadas CTA de Zaragoza, durante un curso de composición de semana. La figura de origen, el Esquema diagonal punto-rectángulo, es el punto de partida, la única conocida previamente, mostrada en libros como la Sintaxis Visual, de Dondis, como ejemplo de equilibrio asimétrico, pero ya presente en algunos tratados anteriores.

Esquema diagonal Punto-rectágulo.

Estas estructuras de equilibrio asimétrico pueden ser utilizadas en cualquier orientación del encuadre según las preferencias del autor. En nuestra cultura occidental las más confortables de percibir son la 1 y la 3.

Esquema diagonal punto-rectángulo 1

Esquema diagonal punto-rectángulo 2

Esquema diagonal punto-rectángulo 3

Esquema diagonal punto-rectángulo 4

Esquema diagonal punto-círculo

 

Esquema diagonal punto-círculo. Una de las estructuras de mayor impacto visual y que no resulta difícil de planificar y obtener.

En este caso es una imagen de mi amigo Peter Cairns, de uso autorizado. La he volteado en horizontal por nuestras preferencias perceptivas.

Si bien esta imagen no se adapta perfectamente al esquema, si muestra el potencial del mismo, su elevado impacto visual. También deja intuir que no son esquemas rígidos en su aplicación.

Esquema diagonal punto-triángulo

 

Esquema diagonal punto-triángulo. Todas estas estructuras son similares cambiando solo la forma básica contrapuesta al punto. En este caso es el triángulo el que equilibra la propuesta visual desde el eje vertical, es la figura dominante en la jerarquía vertical con mayor presencia como eje, ya que acaba en un ángulo agudo.

Esta estructura se asemeja mucho en proporciones al esquema propuesto, con un volteo horizontal.

Aquí vemos la imagen con las líneas y forma marcadas para reforzar su percepción, aunque es bastante evidente.

Igualmente la observamos en vertical, con un punto en primer plano, a la derecha y un triángulo en la parte superior opuesta de contrapeso.

La estructura marcada para una mejor percepción.

De nuevo la estructura, aunque quizá extremando mucho los elementos, llevándolos al límite de proporciones en la proximidad de los márgenes.

En este caso el punto marca el inicio de la roca del primer plano y sus distancias a los márgenes. El espacio se ha repartido de forma eqidistante desde todosa los elementos a los bordes del encuadre.

Esquema diagonal punto-rectágulo

 

Esquema diagonal punto-rectángulo. Esta es la formulación original desde la que parten las otras. Para mi asombro no tenía nombre ni se conoce quien la inventó.

Durante un curso personalizado con Carlos Pérez Naval, el joven talento ganador de diversos premios en el Wildlife Photographer of the Year y en numerosos concursos de prestigio pudimos practicar la estructura original del equilibrio asimétrico.

Aunque un poco desplazados de la estructura se ha utilizado para elaborar esta imagen que forma parte de una narración de un zorro que se adentró en un palomar y resultó muerto, que es lo que sucedió en este caso.

He utilizado mucho estos esquemas antes de conocer la estructura original, por lo que me quedé muy sorprendido al conocerla. En cuanto la vi, supe que muchas de mis fotos se adaptaban a ella. En mi opinión, estos esquemas tienen un elevado impacto visual debido a que:
-Estructuran la imagen de forma eficaz y simple.
-Prolongan la línea diagonal, respetando una distancia al margen.
-No crean fuertes puntos de salida de la imagen.
-Mantienen las proporciones espaciales.
-Crean un equilibrio entre elementos.
-Llenan el encuadre. No permiten el reencuadre.

Hemos visto estructuras basadas en formas básicas, pero en la naturaleza encontraremos muchas situaciones similares aunque con formas diversas y complejas. De la misma forma podemos extraer conclusiones de las formulaciones vistas para adaptarnos a las nuevas situaciones según nuestro gusto.

Cuando la forma en primer plano es un punto, se evidencia la facilidad de crear la formulación, ya que un punto es pequeño, manejable, con la posibilidad de que el artista visual lo incluya en el encuadre, lo coloque allí donde no estaba pero donde nuestra percepción lo puede necesitar.

En muchos casos, la simplicidad que se obtiene resulta muy eficaz teniendo en cuenta la gran cantidad de espacio incluido, la sensación de aislamiento y el pequeño tamaño de los elementos.

Esta formulación claramente deriva de las anteriores, de la percepción del equilibrio asimétrico. En este caso tenemos una forma sinuosa, de “S” o de “8” en el primer plano, que entabla diálogo en diagonal con el eje vertical de la imagen, la figura alargada del faro sobre el horizonte.

Dado que no existen reglas en el arte, mi propuesta es conocer aquellas propuestas visuales, proporciones, estructuras, que puedan referenciar o justificar nuestra composición. Resulta mucho más fácil componer conociéndolas, siendo conscientes de la utilización de unas, otras o combinaciones de las mismas, de forma que podamos adaptarnos a las circunstancias y encontrar un orden satisfactorio a nuestros propósitos en el paisaje, por ejemplo, donde los elementos suelen confundirnos por haber una gran profusión de ellos. Muchas de estas estructuras nos inician en la ardua tarea de sintetizar, de saber decidir qué elementos deben entrar o no en nuestro encuadre.

Para el momento en que estas estructuras ya queden superadas, en busca de esa profusión que tanto nos suele costar ordenar, existen otras más avanzadas, aquellas que nos permitirán enfrentarnos al caos.