José B.
Ruiz

La Teoria de los Edges

UNA TEORÍA FASCINANTE por José B. Ruiz

Rozando la mitología desde la antigua Grecia y Roma, en estrecha relación con el misterio y la fascinación de los Aedes está el término «ultima Thule», que designa cualquier lugar remoto, situado más allá de las fronteras del mundo conocido. Se atribuye al geógrafo y explorador griego Piteas de Massalia en el s. IV a. C. Y significaba la tierra más lejana, un lugar remoto y desconocido, aquella finis terrae donde tierra, aire y mar podían unirse en otra dimensión.


José B. Ruiz.. Esta imagen de San Juan de Gaztelugatxe, representa el concepto de Edge, tanto geográfico, como de tiempo. Ha recibido diversos reconocimientos en certámenes internacionales de fotografía.

Sin duda, ultima Thule nos habla de la fascinación que rodea el concepto de los confines geográficos y se funde a la perfección con el concepto de Edge formulado por Niall Benvie.

Es una teoría fascinante esta de los Edges, es lo primero que pensé cuando Niall me transmitía por primera vez, tras haber leído una breve nota sobre los Edges en una publicación suya, los detalles y pormenores de esta gran aportación al conocimiento sobre Composición. Este fotógrafo de naturaleza es bien conocido en nuestra comunidad internacional por sus altas dosis de creatividad y reflexividad acerca de la fotografía y sus aplicaciones. Como pensador tras una cámara Niall es único y brillante.

Esta primera teoría animista sobre Composición, la de los Edges, ha pasado desapercibida en el sector de la fotografía, salvo en un pequeño grupo en España que se dedica a estudiar Composición. Tras haber publicado de forma breve y superficial la teoría de los Edges en mis libros y tras haberla divulgado en numerosos cursos y presentaciones, decidí encargar un artículo más exhaustivo a varios miembros de un grupo oculto en Facebook que llevaba ya muchos meses de trabajo y estudio sobre Composición. Este es el enlace.
Es curiosa esta sequía que asola desde hace décadas las aportaciones en materia de composición en fotografía o pintura. Y cuando alguien enuncia una teoría que aporta al autor los conocimientos sobre dónde debe buscar sus imágenes, el gran sector de la fotografía permanece impasible e ignorante de este avance. Hay innumerables foros y blogs sobre revisión de material fotográfico, incontables los dedicados a Photoshop y sus posibilidades para alterar una imagen y muy contados aquellos que estimulan las mentes de los fotógrafos. Sinceramente, prefiero desarrollar el cerebro, mis sueños, mis visiones, mis fascinaciones e impulsos antes que mi dedo de apretar el disparador o antes que disponer de un objetivo nuevo y caro que no necesito, antes que aprender a distorsionar una imagen que no he sabido realizar en mi cámara.

José B. Ruiz.. El mundo de Vanessa es una de las imágenes de mi último proyecto, Mundos Interiores. Se trata claramente de un edge temático, el extremo sufrimiento de las personas. En este caso fue totalmente premeditado abordar un tema límite, un edge, fruto del estudio en composición.

Mi amigo y aplicado fotógrafo David López fue el elegido para coordinar este artículo que ahora nos enriquece con las aportaciones de Juan Rodríguez en el texto sobre la teoría de los Edges, de Josefina Consuegra en Viajes a los límites, de David López en Aportaciones a los Edges y de David Carballo en la biografía de Niall y los consejos sobre edges, a ellos debemos agradecer esta aportación que nos debe enriquecer como fotógrafos preocupados por dotar a nuestras imágenes de un cada vez más impactante contenido y estética.

Hubiera sido procedente haber incluido un breve párrafo o incluso un titular en el artículo sobre los riesgos de explorar los edges. Autoras como Diane Arbus que vivieron en un edge continuo terminaron su vida de una forma anticipada y dramática. El precio de llegar al borde del abismo, de caer en la obsesión del edge, puede ser muy elevado, tal y como conocemos en casos de fotoperiodistas, reporteros de guerra, freelances que se imbuyen en los mundos de los crímenes de la mafia, injusticias de dictaduras, etc.

Estoy seguro de que en un futuro la preocupación por crear imágenes de mayor impacto visual y emocional irá creciendo y habrá numerosos autores que recuperarán los conocimientos perdidos y realizarán valiosos aportes al lenguaje del arte, sin duda ellos sabrán valorar el esfuerzo y riesgo que supone hacerlo hoy en día.

LA TEORÍA DE LOS LÍMITES (EDGES) DE NIALL BENVIE por Juan Rodríguez


¿Por qué algunas imágenes nos sacuden emocionalmente, mientras que otras, que aparentemente pudieran ser impresionantes, nos dejan fríos? ¿Qué es lo que hace que la imagen de Jim Brandenburg de un lobo ártico saltando entre témpanos de hielo sea una imagen icónica cuyo atractivo se extiende mucho más allá de los fotógrafos de la naturaleza? Niall Benvie ha llegado a la conclusión de que existe una coincidencia entre muchas de las imágenes evocadoras del mundo natural, una coincidencia que está vinculada al concepto de límites o bordes. Y que supone la primera teoría animista sobre composición en fotografía.

Los límites son zonas de transición en el tiempo, el espacio, o el ser. Más sencillamente, son lugares donde ocurre el cambio y surgen contrastes. Los límites son los extremos, distantes del centro, lo cotidiano, lo usual. El bloque de hielo, en la fotografía de Jim Brandenburg, no es ni la tierra ni el agua, pero si es algo en transición de una a la otra. El espectador tiene que preguntarse lo que ha conducido al animal a esta situación aparentemente peligrosa. Incluso la iluminación es ambigua – parece que estamos en la zona entre la noche y el día. Esta imagen ejemplifica perfectamente por qué el límite (filo-borde) es un tema tan significativo en muchas de las imágenes más atractivas de naturaleza.

Casualmente, mientras trabajaba estos días en la teoría de Niall Benvie, pude ver un reportaje en un conocido programa de misterio de un canal de televisión español al que titulaban “Animales Frontera”. Animales que están entre lo real y lo mitológico, entre la supervivencia y la extinción; el tigre de Tasmania, arañas gigantes, la misteriosa Onza, etc. Cualquier imagen sobre ellos es un verdadero tesoro, aun cuando muchas veces no está clara su autenticidad. Una vez más el límite, la frontera, nos atrae poderosamente.

Si dudas de la validez del concepto de límites, pregúntate por qué la gente prefiere caminar a lo largo de los bordes del mar que por los campos detrás de la arena de la playa. ¿Por qué la gente se siente atraída por la cima de la montaña más que por un saliente a medio camino? ¿Por qué nos arriesgamos bordeando el borde de un cráter en lugar de caminar a una distancia más segura? ¿Por qué saltar desde un puente con un cuerda elástica alrededor de los tobillos? Tal vez la curiosidad innata nos exige descubrir hasta donde podemos llegar, cuáles son nuestros límites. Tal vez nuestro lado más salvaje y rebelde nos empuja a vivir peligrosamente, como si no hubiese una segunda oportunidad. Es difícil dar respuestas a estas preguntas; la gente es así. Pero es el mismo instinto que atrae al fotógrafo de la naturaleza, incluso sin saberlo, hacia los límites. En términos creativos, esto se traduce en la necesidad de experimentar la naturaleza en su forma más extrema y validar esa experiencia mediante la producción de una fotografía de ella.

El concepto de límites, literal y metafórico, está en la raíz de la mayoría de los temas recurrentemente populares entre los fotógrafos de la naturaleza. Parece que hay tres categorías generales en las que caen la mayoría de los temas: Límites en el espacio, límites en el tiempo y, en un sentido metafórico, límites en el ser.

LÍMITES EN EL ESPACIO

Hace referencia a los extremos o fronteras, lejos de lo intermedio. Los lugares donde la tierra se encuentra con el mar son zonas de gran productividad biológica, representan uno de los bordes en el espacio. Tales lugares son periféricos a los centros de la actividad humana y el control del hombre sobre el medio ambiente aquí es menos completo y más vulnerable. El hombre también está fuera de su elemento en el cielo, y donde la tierra se encuentra con el cielo representa el otro gran límite en el espacio. Este es el reino de la silueta y el pájaro en vuelo. Hay pocos fotógrafos al aire libre que no estén atraídos por estos temas tarde o temprano. En estos bordes o límites hay líneas, diferencias entre elementos, en resumen, cambio.

Las áreas geográficamente remotas representan el límite espacial en una escala más grande. La pasión de algunos fotógrafos por conseguir una imagen impactante de la Via Láctea sería un ejemplo de ello, la atracción por los límites del Universo.

LÍMITES EN EL TIEMPO

Los amaneceres y la puesta del sol están entre los temas más populares de todos. Estos son los bordes del día, cuando la fauna presenta mayor actividad y cuando, además, la calidad y la temperatura de la luz puede incluso afectar nuestro estado de ánimo. También hay límites en las estaciones, el colorido de la primavera y el otoño, la nieve en invierno, son extremos y suelen producir imágenes más impresionantes que el verano. Son tiempos de transición y límites en el tiempo. Estos picos de actividad en el mundo natural no coinciden necesariamente con los nuestros, pero una vez más, los fotógrafos van más allá de los límites de la experiencia humana cotidiana para vislumbrar el mundo natural en su estado más vivo. ¿Quiénes han madrugado más veces que los fotógrafos en busca de un amanecer glorioso?

LÍMITES EN EL SER

Los límites en el tiempo y el espacio son fáciles de reconocer, pero ¿cuáles son los límites en el ser? Los tiempos extremos en la vida de un ser nos resultan de gran atractivo. Un cachorro, el ejemplar más viejo de la manada… La mayoría de nosotros estamos atraídos hacia estos individuos en lugar de la masa de la población entre la que se encuentra. El brote de un pino, en yuxtaposición con su padre envejecido y retorcido, es contundente. La expresividad e inocencia en el rostro de un bebe, el rostro arrugado y curtido de un anciano son extremos que nos atraen cuando buscamos un buen retrato. Una manera de interpretar esta tendencia es una atracción hacia los límites de la vida – vidas que apenas han comenzado y las que pronto terminarán. Igualmente nos atraen criaturas y plantas que viven en ambientes extremos, sean los pingüinos emperador de la Antártida o los cactus saguaro en el desierto de Sonora. Más prosaicamente, la saxifraga que crece sobre la roca del gneis hace contraste no sólo entre la materia viva e inerte, sino también de los extremos del tiempo – el gneis Lewisian del noroeste de Escocia tiene una historia de 3500 millones de años mientras que la saxifraga amarilla de la montaña, que brota de una fisura, puede vivir apenas un par de años. Donde la sujeción a la vida parece ser tenue, o la vida misma parece incongruente, podemos encontrar los límites en el ser.

BUSCANDO LOS LÍMITES

Parece, entonces, que lo que hacemos como fotógrafos de la naturaleza es simplemente una extensión de nuestro comportamiento como animales curiosos; tenemos una profunda necesidad de explorar los límites de nuestro mundo, y un impulso inherente a descubrir nuestros límites personales. El éxito creativo viene de ser capaz de canalizar estos instintos en nuestra fotografía.
Pero los conceptos no vienen siempre fácilmente a la mente en el campo cuando estás buscando la imagen. En estos momentos, es más útil pensar en los límites como «lo más»: la arenisca con las líneas más onduladas; la parte más brillante del cielo; la ardilla con la cola más rizada. Estos también son extremos, y no te habrás conformado con el primer ejemplo que has encontrado.

VIAJES A LOS LÍMITES por Josefina Consuegra

Como dice Benvie sería fantástico encontrar que es lo que tienen en común las grandes obras de la pintura para llamar tan poderosamente la atención. Ya son obras de arte por su ejecución técnica, composición, pero qué es lo que las dota de ese impacto visual.

No existe corriente pictórica que se base en esta teoría exactamente pero si podemos encontrar ejemplos de magníficas obras en las que los edges están presentes: escenas de nacimiento o muerte, exaltaciones de la primavera o escenas otoñales, preciosos atardeceres o amaneceres, acantilados, riberas, tempestades. Pero sin lugar a duda es en la fotografía y en concreto en la de naturaleza donde esta teoría encuentra su fundamento y ejemplos mas claros.

Niall Benvie formula la teoría de los edges en 2002, aunque si estudiamos su portfolio no encontramos entre sus proyectos una aplicación directa de la misma.
Contemporáneo de Benvie tenemos a Art Wolfe, artista, productor de televisión, conservacionista y fotógrafo estadounidense (nacido el 13 de septiembre de 1951 en Seattle, donde vive), que en su carrera de 30 años, ha trabajado en cada continente y en centenares de localizaciones. Su trabajo bien se puede englobar bajo la teoría de los Edges. Sus imponentes imágenes interpretan y registran fauna en peligro de desaparición, paisajes y culturas nativas, todo ello se encuentra al límite de su existencia, al limite de su ser. Su serie documental se titula Travels to the edge haciendo referencia exactamente a esos límites. El Valle de Omo en Etiopia, las tribus del Amazonas, la vida salvaje en Nepal e India entre otros son objeto de estos documentales.

Art Wolfe. Kenya Masai Mara.

Si tomamos esta vía de estudio, la del limite de la existencia o la existencia al límite, podemos encontrar ejemplos en los trabajos de fotógrafos desde principios del siglo XX. La primera mitad del siglo XX fue especialmente convulsa, dos guerras mundiales, la gran depresión por el crack de la bolsa americana entre otras calamidades pusieron a la humanidad al limite y hubo varios fotógrafos interesados en enseñárnoslo. Fue el comienzo del fotoperiodismo y la fotografía denuncia.

El trabajo de Dorothea Lange para la Farm Security Administration, cuya función fue estudiar la situación del mundo rural norteamericano y tratar de ponerle remedio, fue importantísimo y algunas de sus imágenes son iconos.

Dorothea Lange. Migrant woman.

Con el estallido de la segunda guerra mundial fotógrafos independientes como Robert Capa ofrecieron imágenes objetivas de la guerra mostrando el sufrimiento de las poblaciones afectadas y de los combatientes.

Robert Capa. Desembarco de Normandía.

Diane Arbus, fotógrafa neoyorquina que destacó por sus trabajos de la década de los 60, en la que recorrió los barrios mas peligrosos de la ciudad. Eligió para sus fotografías a personas marginales: enfermos mentales, gigantes, familias disfuncionales, fenómenos de circo, etc… El límite llevado a la esencia de la persona, mostrando su cara más ácida y sombría.

Diane Arbus. Two women.

Ya en la actualidad seguimos encontrando ejemplos de artistas que nos muestran estas vidas al límite, al limite de la normalidad, al limite de lo humano. Es el caso de Pieter Hugo, fotógrafo sudafricano (nacido en 1976 en Johannesburgo, vive en Ciudad del Cabo, donde creció) que ha realizado interesantes trabajos de fotoperiodismo sobre el continente africano. Queremos destacar dos trabajos en particular:
• Permanent Error refleja una zona marginal, Agbogbloshie, en Ghana, o “el lugar sin nombre” como lo llaman los lugareños. Es un impresionante basurero de placas base, ordenadores, cintas de vídeo, basuras tecnológicas, restos del consumo occidental que van a parar a esas tierras, donde conviven con los pobladores y sus ganados.
• Looking A Side trata entre otras cosas al albino en la África negra.

Pieter Hugo. Empty Kingdom.

Pieter Hugo. Looking a Side

APORTACIONES DESDE LOS EDGES por David López

La teoría de los edges (límites) nos hace investigar y buscar en las zonas donde hay un límite físico como los lindes de bosques y desiertos o la separación del agua con la tierra, nos dice que son precisamente esos límites los que nos atraen visualmente como los extremos de un mismo ser en determinadas fases de su vida como la niñez o la vejez con rasgos muy marcados o esos días en que cualquiera de las 4 estaciones llegan a su clímax mostrando toda la dureza o belleza.
Nuestra meta como fotógrafos es conseguir la imagen mas impactante o bella posible del mundo que nos rodea y en este mundo resulta que hay muchos mundos separados por finas líneas donde se llegan a mezclar, donde interactúan y donde se enfrentan y no hay fronteras mas complejas que las que los humanos nos imponemos a nosotros mismos, fronteras que no son visibles ni físicas sino morales, éticas, raciales e incluso económicas.
Hay mundos entre mundos y los pasamos por alto. En la sociedad tenemos extremos muy bien definidos como la riqueza y la pobreza pero no hay muros que los separe, entre ellos existe una interacción que solemos pasar por alto, nos centramos en conocer la pobreza y la riqueza exageradas y mostrarlas pero hay una infinita gradación intermedia que puede pasar desapercibida, muchos grados visibles o invisibles de desigualdad social, discriminación, rechazo.
Uno de los extremos más oscuros del ser humano lo podemos encontrar en los conflictos y guerras. El miedo, la violencia, la necesidad, el desarraigo, la pérdida. El Edge que supone una despiadada guerra solo encuentra un paliativo en la caridad más obsesiva, en el altruismo y la entrega de uno mismo a una causa. Tal vez sean los extremos del ser humano los que más se asemejen al borde del abismo.
Los Edges de Niall Benvie pueden ser entendidos como dos mundos extremos y casi opuestos en sus facetas de tiempo, geografía o seres, pero también como un encuentro, el lugar o momento en que los extremos se solapan y conviven, con todas esas gradaciones y variaciones que son infinitas. Las imágenes de los extremos son muy atrayentes, por ese mismo concepto de no poder ir más allá, pero a la vez lo son en la mezcla, en el punto de coincidencia que provoca un contraste más o menos acentuado.
En mi opinión, lo fascinante de esta teoría de los Edges es precisamente que marca unos puntos de contacto donde la disparidad que afecta al paisaje, al comportamiento, a la percepción, a los sentimientos, puede despertar un impacto visual quizá menor que el propio Edge, pero no menos real y fascinante.

BIOGRAFÍA DE NIALL BENVIE por David Carballo

Nació en Arbroath, al este de Escocia, en 1964. Tras una primera etapa como agricultor, en la granja familiar de su localidad natal, en 1993 finaliza sus MA (Master of Arts) en Geography and Contemporary European studies en la Universidad de Dundee (Escocia).

A partir de esta fecha trabaja como fotógrafo, diseñador y escritor, con especial interés en el dinamismo de la naturaleza y la cultura. Sus textos, al igual que su fotografía, cubren aspectos tan variados como la extracción de turba en los estados del Báltico, la reintroducción del lince europeo en Alemania o los pastos de ciervos en su nativa Escocia.

Escritor e ilustrador de seis libros, tres de ellos con ediciones internacionales, entre los que cabe destacar “Outdoor Photography Masterclass” y “Caledonia: Scotland’s heart of pint” (con Pete Cairns), y conferenciante en numerosos países.
Tras más de 20 años de experiencia profesional ha sido nombrado como uno de los 40 fotógrafos de naturaleza más influyentes del mundo, y es reconocido como un acérrimo defensor del medio ambiente.

Entre sus muchos méritos, cabe destacar:
➢ Miembro Fundador de la Liga Internacional de Fotógrafos de Conservación (dimitió 2014). 2005
➢ Director fundador de Wild Wonders of Europe , la mayor iniciativa fotográfica pro-ambiente de Europa. 2006
➢ Fundador de la Feria Escocesa de Fotografía de Naturaleza. 1991
➢ Líder creativo en la iniciativa 2020VISION para promover la importancia de los servicios de los ecosistemas. 2010
➢ Co-creador, junto al fotógrafo americano Clay Bolt, de Meet Your Neighbours , una colaboración mediática mundial entre decenas de fotógrafos para promover la importancia de la biodiversidad de los vecindarios. 2009
➢ Asesor y juez de varias competiciones internacionales de fotografía.
➢ Fotógrafo en la residencia en el castillo de Glamis, Angus. 2012
➢ Co-fundador de Rewilding Childhood, creando materiales para apoyar el compromiso de la infancia con la naturaleza.
➢ Columnista de la revista Outdoor Photography  
En la actualidad se le conoce como el filósofo fotógrafo, destacando por su capacidad de pensar, de encontrar siempre una nueva derivación, una nueva idea, una nueva forma de expresión, siendo un gran exponente internacional a la hora de elaborar mensajes visuales.
El paso del analógico al digital lo dio en 2005, lo que supuso un cambio drástico en su forma de trabajar. Las posibilidades de postprocesado y retoque de las imágenes supuso una nueva oportunidad para plasmar sus ideas en esas imágenes con mensajes.
En su obra clásica se considera un fotógrafo conservador, buscando la luz y composición correcta desde el principio, sin recurrir a la edición digital para mejorarla. En su obra más creativa se permite licencias, utilizando programas como photoshop para, por ejemplo, obtener procesados tipo polaroid.

Descubre el light painting gracias a José Benito Ruiz, que es el que le enseña a utilizar linternas y flases para iluminar escenas nocturnas, aplicándolo a entornos naturales para centrar la atención en la parte de la fotografía que a él le interesa.

Durante varios años ha trabajado la fotografía de naturaleza con fondos blancos, recalcando que ésta se realiza en el medio natural y no en estudio, nunca ha arrancado una planta para fotografiarla. El hecho de trabajar con estos fondos blancos le permite hacer composiciones más elaboradas.
Otra de sus pasiones fotográficas es la de hacer herbarios a los que le aplica un diseño antiguo, con textura de pergamino y tratarlos como si fueran una colección vegetal.

Según Niall nos encontramos ante el final del equipo de un solo hombre, porque hoy en día hay que saber no solo de fotografía sino también de edición, vídeo, redes sociales, etc., lo que nos lleva a fomentar sinergias y el trabajo en equipos multidisciplinares.

Otro aspecto a destacar dentro de la evolución que está sufriendo la fotografía, según Niall, es la diferenciación que se puede hacer entre fotografía de naturaleza (aquella que busca la localización, que estudia las costumbres de los animales, espera el momento de luz idóneo y estar horas escondido esperando al sujeto a fotografiar) y el foto turismo (más elitista, en la que se paga una remuneración, generalmente elevada, para desplazarse a un lugar donde ya está preparado un escondite en el que en un par de días verás lobos y osos) para gente con poco tiempo y mucho dinero.

“Images from the Edges”, es una teoría animista de composición (la primera que ha habido) a la que le ha dedicado mucho tiempo, preocupado en el porqué hay unas imágenes que nos llaman mucho más la atención que otras, siendo el mismo sujeto y, a veces, el mismo lugar.

Es una teoría sobre los bordes, los límites, las fronteras…es ahí donde está la fotografía. En el límite entre el día y la noche, entre el bosque y el valle, entre lo joven y lo viejo, ahí es donde hay líneas, cambio, movimiento.

Del hecho de intentar entender el porqué de repente esa foto cotidiana llama especialmente la atención surgió dicha teoría de los “edges”. Y es porque esa foto ha sido tomada en un momento especial de luz o de un individuo especialmente viejo o joven, siendo éste el punto de partida sobre la exploración de los sujetos que ha realizado.

Actualmente Niall Benvie junto con su esposa Charlotte Benvie, son guías en viajes fotográficos tanto en Islandia como en Escocia. Su vida laboral hoy en día es muy variada, abarca desde el trabajo con clientes para crear materiales de comunicación, a la enseñanza, guía de viajes o escritor.

“Trabajar con Niall siempre es un desafío muy positivo: su mente creativa produce constantemente nuevas ideas y conceptos que provocan la reflexión cuando se enfrentan a una visión o un problema. De repente, te encuentras mirando cosas desde una nueva perspectiva”. Florian Moellers, Director del proyecto Wild Wonders of Europe.

Webgrafía:
http://niallbenvie.com/team/niall-benvie/
https://niallbenvie.photoshelter.com/about
http://test.niallbenvie.com/wp-content/uploads/2014/06/Niall-Benvie_cv_210213.pdf
http://montphoto.com/website/noticies.asp?id_noticia=163
https://www.miradanatural.es/revista-digital/varios/jose-b-ruiz/premios-fotocam-2008/74/
• J. B. Ruiz. Un año de fotografía. Master Class Fotografía, inteligencia y educación. Sesión 11.2 Master Class Niall Benvie. https://www.youtube.com/watch?v=LPn6G5Q-V6E
• Fotografías: Niall Benvie

CONSEJOS SOBRE EDGES por David Carballo

o Para encontrar el ”límite” debes presionarte a ti mismo, física y creativamente, pero las imágenes resultantes serán distintivas.
o Cuando realices trabajo de campo, piensa en los límites como “lo más”, como extremos o contrastes, no te conformes con el primer ejemplo que te encuentres, busca lo que esté fuera de lo ordinario.
o Recuerda que los límites cercanos a casa pueden ser tan espectaculares como los de lugares remotos; el personal convencimiento de encontrarlos y compartirlos es fundamental.
o Si estás perdido sobre que fotografiar, empieza por pensar en salir fuera en las horas límite del día a un lugar que esté poco visitado, y cuando estés ahí, busca “lo más”.

Bibliografía:
– The Art of Nature Photography. Niall Benvie. (AMPHOTO BOOKS, 2000)
– The Edge Concept. Niall Benvie. (www.imagesfromtheedge.com Fed by Photos Blog, 2001).
– El fotógrafo en la naturaleza. Jose B. Ruiz. (Fine Art Editions, 2008)
– Composición en Fotografía. Jose B. Ruiz. (Fine Art Editions, 2010)